Es de esos vinos que mantienen la esencia de la vinicultura del Monte Lentiscal, que te transportan a una zona y a unas vinificaciones que, siendo tradicionales, son serias y constantes en el tiempo. Un fiel representante de su comarca, que se muestra limpio de aromas, de no mucha intensidad pero agradable, y con tipicidad. Esa sensación se transmite en la boca dando un vino ligero, mineral y de taninos bastante amables.
Gran Canaria - Plaza perdida 3 meses en barrica
10,95 €Precio